Sábado, 1 de febrero de 2014
Para nuestro segundo día en París optamos por un medio de transporte que nos resultara
cómodo: el Batobus.
Ya os hablé aquí del servicio que ofrece esta
empresa y pienso que por 15 € por persona merece la pena, ya que prácticamente
te deja a pie de los principales monumentos:
Éste fue el recorrido que hicimos:
CAMPOS ELÍSEOS- ARCO DE TRIUNFO- PLAZA DE LA CONCORDIA- TORRE
EIFFEL- NOTRE DAME- LOUVRE
En primer lugar, fuimos en metro hasta los Campos Elíseos:
¡Una calle muy grande y muy limpia! ¡Me encantó! Si alguna
vez vais por allí, además de infinidad de concesionarios de coches con los
modelos más exclusivos y caros del mercado, podréis ver el coche campeón de F1
con el que mi marido alucinó:
NOTA POTINGUIL: en los campos Elíseos se encuentra el
Sephora más grande y más bonito que he visto nunca y al lado una tienda de MAC
de alucine también.
Tras ver el Arco de Triunfo y recorrer los Campos Elíseos,
nos dirigimos hacia la bonita plaza de la Concordia:
Una vez allí nos dirigimos hasta el puente de Alejandro XIII
a coger el Batobus en la parada Los Campos Elíseos. Comenzamos entonces nuestra
excursión en el Batobus y bajamos en la Torre Eiffel:
Os dejo una foto hecha desde la parada del Batobus para que
veáis lo realmente cerca que estaba de la torre:
Es imposible no quedarse un buen rato admirando la torre…que
sí, que es una antena, pero tiene algo…empezamos a notar ese “je ne sais quois”
de París.
Como no me llevo bien con las alturas y tampoco me apetecía
hacer la cola inmensa que allí había, decidimos no subir a la torre. Si vais y
queréis subir en esta página http://www.toureiffel.paris/ podéis consultar los precios y las distintas
formas que tenéis de acceder a la torre.
Después de deleitarnos un buen rato con la torre, cogimos el
Batobus y nos fuimos hasta Notre Dame.
Queríamos comer en el barrio Latino, una zona con
restaurantes a buen precio (y también para los souvenirs junto a Montmartre).
Os hablé de nuestra experiencia gastronómica aquí.
Recién almorzados decidimos hacer la visita a Notre Dame con
sus impresionantes cristaleras de colores:
Desde abajo, vimos las gárgolas que protegen París y hasta
nos pareció ver a Quasimodo xD (París es mágica y allí todo es posible).
Por último, teníamos reservada la visita al Louvre, pero
llegamos tarde porque cerraban en 15 minutos:
Aún así, dentro del Louvre hay una especie de centro
comercial que sí está abierto hasta más tarde y que nos tuvo entretenidos un
buen rato. También pudimos ver la pirámide de cristal desde abajo:
Nota curiosa: usar los aseos públicos del Louvre cuesta 1 €.
Por 1.5 € tiene un lugar llamado Punto WC, en el que limpiaban minuciosamente
los baños después de que cada persona entrara y podías comprar cualquier tipo
de papel higiénico xD.
Después de un día tan ajetreado, no nos quedó ganas de nada,
así que compramos bocadillos en un supermercado y cenamos en el hotel.
Nuestro vuelo salía temprano y respiramos hondo ese aire
parisino, que huele a perfume o a chocolate, y nos fuimos embrujados por la
belleza de París, sabiendo que vamos a volver porque nos ha sabido a poco.
Recordamos las palabras de una de las pelis de Disney que
más nos gustan y entendemos ahora más que nunca la verdad que hay en ellas: